El sismo de magnitud 5,9 que sacudió el pasado sábado a Haití y que
causó 17 muertos, destruyó 353 viviendas y provocó daños a 7.430 casas,
según datos preliminares difundidos hoy por la Dirección de Protección
Civil. Unas 7.783 familias resultaron afectadas por el terremoto,
cuyo epicentro se registró frente a la costa noroeste, 20 kilómetros al
norte de Port-de-Paix y a 175 kilómetros de Puerto Príncipe, a una
profundidad de 15,3 kilómetros, y al que han seguido varias réplicas,
unas de ellas de magnitud 5,2 este domingo.
Asimismo, en la
actualización de los daños provocados por el movimiento telúrico, la
Dirección de Protección Civil elevó a 427 la cifra de heridos, aunque un
buen número de ellos ya ha sido despachado debido a que las lesiones
eran menores.
Un total de 42 edificaciones, entre ellas escuelas e iglesias, resultaron también con algún daño. Las
localidades más afectadas son Port-de-Paix, donde murieron 9 personas;
Gros Morne, en el departamento de Artibonite, con 7 fallecidos; y
Saint-Louis du Nord, donde se produjo una muerte.
Por su lado, el
Gobierno anunció la entrega de alimentos y artículos de limpieza para
los afectados, así como la reparación del hospital de Port-de-Paix, el
Inmaculada Concepción, que resultó agrietado y donde muchos heridos
fueron atendidos en las afueras debido a las limitaciones en este
centro. El sismo agravará la precaria situación de este país, muy
vulnerable a los fenómenos naturales y donde más de la mitad de los 10
millones de habitantes sobrevive con menos de 2 dólares diarios.
Además,
la situación provocada por el movimiento telúrico impactará
directamente en el sector vivienda en este país, con un déficit crónico
en esta materia, ya sea por la falta de casas o por la precariedad de
muchas de ellas. Este terremoto es uno de los más fuertes que ha
afectado a Haití tras el del 12 de enero de 2010 de magnitud 7, seguido
de tres réplicas superiores de magnitud 5, que causó más de 300.000
muertes, similar número de heridos, unos 1,5 millones de damnificados y
la casi total destrucción de su capital, Puerto Príncipe.