El apoyo desinteresado de las emisoras, djs y otros medios difusores hacia los artistas ha desaparecido. Ahora todo se mueve con dinero, y el que no tenga no se ayuda sin importar quien sea. Hoy en día en la industria de la música urbana, lograr o mantener una pegada se hace difícil debido a los altos peajes que tienen los diversos sectores de promoción en el mercado. Esta triste realidad le ha trancado el juego a muchos exponentes que cuando no existían las altas ganancias económicas que se aprecia en la actualidad, sonaban hasta “en el último rincón”, pero luego, al no ajustarse a los cambios, su imagen mermó dentro del gusto popular, situación que les impide generar dinero a través de la música para mantenerse.
“Algunos de los artistas que fueron responsables de hacer que el movimiento creciera, están pasando trabajo porque ya no están pegados, antes no había dinero en la música, por eso muchos quizás no le dieron importancia al negocio sino que lo hacían por amor, ahora sí hay mucho dinero y regresar se les hace difícil porque ya para todo hay que pagar, no se hace por amor como antes”, asegura Jean Carlos Pimentel, mejor conocido como Urbano DR, quien es uno de los pioneros de suministrar información del género urbano vía streaming, específicamente en YouTube.
En ese sentido, agregó que “esto es por culpa de un grupo que se encargó de dañar el negocio y sobrepagar la payola a quienes tienen medios y plataforma de promoción. Entonces el promocionarse en la actualidad sale caro, y esos artistas no tienen como generar esos pagos. Ya no hay apoyo real, ahora es todos por interés”.
EL PRECIO DE LA FAMAUn cantante de música urbana debe tener alrededor de 1.5 millones de pesos para costear todas las vías de promoción. Únicamente agotar los procesos tradicionales representa un gasto, dígase CD variados, asociaciones de DJ, emisoras, redes sociales, estudios de grabación, páginas y otros canales alternos.
AFECTADOS CON CALIDAD
Entre los urbanos que buscan una segunda oportunidad a puro pulmón están: Pablo Piddy, Mr Manyao y El Ha2, El Principe Baru, Carlitos Wey, Beethoven Villaman, Milka La Más Dura, entre otros. Además otros como Doble T y El Crok, El Poeta Callejero, Melymel, El Chuape, Paramba y El Súper Nuevo, han tenido que pactar con empresarios sin obtener un porcentaje significativo solo por pegarse de nuevo.
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