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Santiaguero condenado a cadena perpetua por doble asesinato de dos clérigos.


Un juez de la Corte Suprema Estatal en Queens, sentenció ayer jueves a cadena perpetua al dominicano Oscar Morel, encontrado culpable de las ejecuciones con sendos tiros en las nucas, de dos clérigos musulmanes, cuando acababan de salir de un servicio en una mezquita en ese condado. Morel, nativo de Santiago de los Caballeros, ha mantenido su inocencia desde el primer día, alegando que nunca tuvo un arma en sus manos. La policía dijo en el momento que en un allanamiento en la habitación en la que vivía Morel, encontraron un revólver con el cañón recortado, metido en un hueco de la pared, diciendo el experticio balístico determinó que esa es el arma homicida.

Él tendrá que pasar el resto de su vida en la cárcel, porque en la sentencia, el juez no le dio oportunidad a libertad condicional. Los fiscales alegaron en el juicio que prefirió enfrentar Morel, antes que negociar con la fiscalía, que después de asesinar a los clérigos islámicos Maulama Aknojee y su asistente Thara Uddin, en agosto de 2016. El juez Gregory Lasak, que condenó a Morel, calificó los asesinatos como homicidios a sangre fría.

Los dos clérigos acababan de salir de la Mezquita Al-furqan Jame Masjid en Ozone Park (Queens), justo antes de las 2:00 de la tarde, cuando Morel supuestamente les disparó en las cabezas por la espalda con un revólver calibre 38. “Esto no fue una pelea”. Esto no fue una disputa No hubo discusión. Esto no fue un robo o atraco”, dijo el juez Lasak. “Inmediatamente empiezas a disparar cuando te encuentras con estos dos hombres caminando por la calle. Fue un asesinato a sangre fría. No fue un asesinato al azar”, agregó el magistrado antes de enviar a Morel de por vida a la cárcel.

“Apuntaste a estos dos hombres. Usted planeó esto. Usted preparó esto. No actuaste nervioso. Estabas calmado. Actuaste de manera normal”, añadió un airado magistrado.

El hijo del clérigo líder también le preguntó a Morel por qué cometió el crimen atroz antes de que se dictara su sentencia

“La pregunta que ha venido de todos los rincones del mundo es ¿por qué, Oscar?, te preguntamos, ¿por qué hiciste esta cosa terrible?”, le dijo el hijo, Saif Akonjee. “Sabemos que no nos devolverás a nuestro padre. Si no respondes, por qué debes saber que vendrá otro día de juicio, del que no podrás librarte. Tendrás que responder”, insistía el hijo del clérigo. Morel negó los cargos y se declaró “no culpable” a través de su abogado en la audiencia de lectura de cargos. Fue dejado preso sin derecho a fianza y enviado a un Gran Jurado, que evaluó evidencias, testimonios y el nivel de las acusaciones.

Según los fiscales, apareció en el video de una cámara de seguridad en las inmediaciones de la mezquita, disparándoles a los dos musulmanes y luego huyendo. Otra cámara, captó el momento en que atropelló un ciclista. Tanto la madre de Morel, señora Ana Morel, quien sufre de cáncer y Alvin Morel, uno de sus hermanos, dijeron no saber porqué el dominicano cometió el horrendo hecho.

Morel, fue arrestado en el apartamento en el que vivía solo en el vecindario East New York en Brooklyn

Fue identificado por un diseñador de dibujos para telas que se transportaba en una bicicleta y a quien atropelló en la zona llamada “Los Sures de Brooklyn”, frontera entre ese condado y Queens, durante su huida. Sus parientes lo describieron como un hombre tranquilo y pacífico, que sólo se movía de su habitación al trabajo y viceversa, pero su huida, minutos después de presuntamente haber ejecutado a los musulmanes, Morel atropelló a un diseñador de dibujos en telas que iba en una bicicleta. “Nunca olvidaré su mirada”, dijo el diseñador que logró ponerse de pie y tomar el número de la placa del vehículo en el que Morel huía y lo atropelló.

El acusado, se transportaba en un carro Chevy Trail Blazer, con el que atropelló al diseñador que iba en la bicicleta. Morel, no ha revelado aún el motivo que supuestamente tuvo para asesinar a los líderes islámicos, cuando ambas víctimas caminaban después de salir de su templo. Su amigo Amado Batista, de 59 años de edad, dijo que Oscar, “siempre ha sido muy agradable y nunca lo he oído hablando mal de los musulmanes”.

Batista dijo que le sorprenden las acusaciones a Morel, porque casi ni lo veía, cuando él llegaba de su trabajo. Batista, que es también dominicano y dueño de una casa, le rentaba la habitación a Morel. “Uno no se explica cómo pensamos los seres humanos, porque él trabajaba en una escuela”. Un hermano del asistente del imán asesinado, dijo que Morel debe dar la respuesta de porqué mató a su hermano, que era un clérigo honesto y trabajador y que no se metía con nadie.

Miguel Cruz Tejada