El número de muertos por la erupción del volcán de Fuego en Guatemala se elevó este lunes a 38, dijo el secretario de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), Sergio Cabañas, mientras se reanudan los trabajos para buscar a sobrevivientes de la tragedia. La jornada estuvo marcada por una nueva explosión que registró el cono de 3.763 metros de altura, que obligó a una suspensión de las labores, y por un sismo de 5,2 grados que sacudió la costa del país. La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) también elevó de 20 a 46 la cifra de heridos, mientras que los afectados suman más de 1,7 millones de guatemaltecos.
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumen) reportó que el volcán está volviendo a su normalidad, pero advirtió que las barrancas de hasta 80 metros de profundidad están llenas de material volcánico.
Además, alertó que las lluvias son el principal riesgo porque pueden causar lahares (una especie de avalancha) de flujo piroclástico, una mezcla de gases volcánicos calientes que se mueve al nivel del suelo.