La redacción de CDN continúa publicando este viernes la confesión que dio al Ministerio Público uno de los implicados en el asesinato de la joven embarazada Emely Peguero. Se trata de la versión declarada por Simón Bolívar Ureña Almánzar (El Boli), señalado como la persona contratada para mover el cadáver de la adolescente embarazada, cuyo cuerpo fue hallado a finales de agosto de 2017, en estado de descomposición dentro de una maleta en la provincia Espaillat. Los principales sospechosos por el crimen son Marlon Martínez y su madre Marlin Martínez.
En principio medios nacionales publicaron la versión de que Marlin había pagado unos cien mil pesos para el traslado del cuerpo, lo cual fue refutado en la declaración de El Boli que hoy publica CDN. La declaración sale a la luz este viernes, el mismo día en que los jueces de la Corte de Apelación del Distrito Judicial de San Francisco de Macorís conocerán este viernes el recurso de apelación interpuesto por Marlin y Marlon Martínez.
En su confesión el señor Ureña Almánzar fue muy preciso al señalar las cantidades económicas que Marlin se mostró dispuesta a desembolsar con la intención de ocultar el asesinato.
“Entonces ahí ella me dice a mí búscame alguien que se deshaga del cadáver. En ese momento ella me dijo que estaba dispuesta a pagar seiscientos mil (600,000), ochocientos mil (800,000) o un millón de pesos (1,000,000) o lo que fuera a quien desapareciera el cadáver de forma efectiva y segura”, admitió El Boli, quien guarda prisión preventiva por el caso.
El cadáver de Peguero fue encontrado la noche del jueves 31 de agosto dentro de una maleta, en la comunidad La Guama en el municipio de Cayetano Germosén en la provincia Espaillat. Estaba reportada como por sus familiares en la provincia Duarte.