Nueva Jersey.- Tras 26 años de incertidumbre sobre quién le disparó de muerte al joven Juan de León, el 11 de febrero de 1990, hace unos meses la policía de la ciudad de Nueva York recibió la confesión de un vecino que señaló a Zunilda Rosario como la autora del crimen, ocurrido en Harlem, Manhattan. Según esa confesión, Zunilda Rosario, quien tenía una hija en común con De León, discutía fuertemente con el hombre en uno de los pasillos del edificio en que residían, en el 510 de la calle 150 Oeste. Aquél día, las palabras fueron ahogadas por el sonido de los disparos.
Más tarde, De León apareció muerto en el pasillo, con un disparo en la cabeza y otro en el pecho. Ninguno de los vecinos interrogados por las autoridades dijo haber escuchado o visto algo sospechoso.
Zunilda Rosario, supuestamente afectada por la muerte, abandonó el edificio junto a sus dos hijas y reiniciaron sus vidas en otro estado.
En febrero de este año, un vecino contactó a la policía de la ciudad de Nueva York y ofreció su versión de los hechos. Al interrogar a otras personas, los detectives confirmaron que Rosario era la principal sospechosa.
Se movilizaron hasta su residencia actual, en Rhode Island, pero no lograron dar con la mujer. El jueves, los detectives del NYPD alertaron a la policía de la Autoridad de los Puertos de Nueva York de que Zunilda Rosario estaba supuesta a llegar al aeropuerto John F. Kennedy, JFK, en un vuelo procedente de la República Dominicana. Y así fue.La mujer, de 48 años, fue puesta bajo arresto y acusada de asesinato y posesión ilegal de un arma de fuego. Un juez de la corte criminal en Manhattan decidiría el viernes si le permite quedar en libertad bajo fianza.