“No podemos ser jamás un pueblo de borregos con líderes genuflezos a lo que diga el imperio, deberíamos tener dignidad y vergüenza que fue lo que le sobró a Duarte y los trinitarios”.
Bretón cree que tanto autoridades como ciudadanos deben asumir el rol de defensa de la patria.
“Hubo unos tiempos en lo que no quedó más remedio que la de empuñar las armas, pero precisamente para algo nos educamos para crecer y entendernos con el diálogo. Si no es para no dejar pisotear los principios que dieron origen a lo que orgullosamente llamamos República Dominican debemos estar dispuestos hasta morir”, adujo.
Bretón advirtió que las injerencias que antes venían de los ejércitos, ahora se hacen de manera más solapada y descarada y no hay quien nada.
Dijo que los trinitarios no estuvieran de acuerdo con aquellos que claudican ante el imperio.
El arzobispo dijo que no hay ejército que se presente en la frontera, peor a veces hay formas sutiles, a veces descarada de las grandes potencias amenazan la dignidad como nación.
Recordó que los obispos se reunieron para expresar su posición al verse precisados a denunciar las actividades del embajador estadounidense James Brewster. En el encuentro estuvo el ministro de Educación, Carlos Amarante Baret, así como Juan Daniel Balcácer de Efemérides Patrias y las autoridades locales.
