La medida de prisión preventiva que pesaba en contra de los jueces suspendidos Awilda Reyes y Francisco Arias Valera, acusados de prevaricación y soborno, fue variada por prisión domiciliaria. La decisión fue tomada por el juez de la instrucción especial del Primer Tribunal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, Antonio Sánchez Mejía, alegando que el Ministerio Público no logró demostrar que con la puesta en libertad de los acusados se obstruirían las investigaciones del caso.
La disposición del juez también establece que los abogados de los imputados lograron demostrar que sus clientes poseen suficiente arraigo para presentarse a todas las audiencias y no sustraerse del proceso.
El abogado defensor de Arias Valera, Carlos Balcácer, se ofreció como garante para que se varíe la prisión de su defendido, y presentó una titulación de propiedad de Arias Valera. En el caso de Awilda Reyes, su abogado, Harold Echavarría, dijo que los padres de esta se harían responsables.
Durante la audiencia, además, se expresó que nunca le ha pasado por la mente sustraerse del proceso y que quería que se le variara la medida porque tiene dos hijos menores que dependen exclusivamente de ella.
La disposición del juez también establece que los abogados de los imputados lograron demostrar que sus clientes poseen suficiente arraigo para presentarse a todas las audiencias y no sustraerse del proceso.
El abogado defensor de Arias Valera, Carlos Balcácer, se ofreció como garante para que se varíe la prisión de su defendido, y presentó una titulación de propiedad de Arias Valera. En el caso de Awilda Reyes, su abogado, Harold Echavarría, dijo que los padres de esta se harían responsables.
Durante la audiencia, además, se expresó que nunca le ha pasado por la mente sustraerse del proceso y que quería que se le variara la medida porque tiene dos hijos menores que dependen exclusivamente de ella.