Un joven se enojó porque un hombre mayor lo reprendió por su forma de conducir. Y decidió utilizar su automóvil para responder.
Parecía un incidente menor, bastante frecuente en las calles de Moscú. Un joven a bordo de un BMW 116 blanco intentó, el pasado lunes 14, sobrepasar por la derecha a un hombre mayor, que conducía un Nissan Almera color verde.
Enojado por la maniobra imprudente, el segundo conductor frenó ante el primer semáforo rojo y se bajó del vehículo. Se dirigió hasta la ventana del BMW y lo increpó, quizás con insultos.
Aparentemente tranquilo, el joven se quedó sentado sin responderle. Pero cuando el otro volvía hacia su auto, aceleró y lo atropelló.
Unos metros más adelante, frenó y se bajó del vehículo. Cuando todos esperaban que, arrepentido, fuera a ver el estado de su víctima, se limitó a dar media vuelta a su vehículo y cerciorarse de que no tuviera daños graves.
La escena fue registrada por un tercer automovilista, que grabó todo con una cámara que tenía detrás del parabrisas. Este testigo en ningún momento se bajó del auto para socorrer al herido, que tenía las piernas rotas y no se podía levantar.
Tras varios segundos sin que nadie se acercara, una motociclista acudió en su ayuda. Luego se acercaron dos personas más, quienes llamaron a la ambulancia.Según informó Russia Today, el conductor del Nissan presentó cargos contra el agresor, que permanece prófugo.
Enojado por la maniobra imprudente, el segundo conductor frenó ante el primer semáforo rojo y se bajó del vehículo. Se dirigió hasta la ventana del BMW y lo increpó, quizás con insultos.
Aparentemente tranquilo, el joven se quedó sentado sin responderle. Pero cuando el otro volvía hacia su auto, aceleró y lo atropelló.
Unos metros más adelante, frenó y se bajó del vehículo. Cuando todos esperaban que, arrepentido, fuera a ver el estado de su víctima, se limitó a dar media vuelta a su vehículo y cerciorarse de que no tuviera daños graves.
El joven agresor se bajó, pero no estaba arrepentido. Solo quería ver que su auto estuviera sano
Volviendo a su puesto, miró con desprecio al hombre mayor, que se revolcaba de dolor en el suelo, y se marchó. La escena fue registrada por un tercer automovilista, que grabó todo con una cámara que tenía detrás del parabrisas. Este testigo en ningún momento se bajó del auto para socorrer al herido, que tenía las piernas rotas y no se podía levantar.
Tras varios segundos sin que nadie se acercara, una motociclista acudió en su ayuda. Luego se acercaron dos personas más, quienes llamaron a la ambulancia.Según informó Russia Today, el conductor del Nissan presentó cargos contra el agresor, que permanece prófugo.
