El Arzobispado de Santiago informó este viernes que el padre Wojciech
Gil (Alberto), acusado de abuso sexual infantil, fue suspendido de sus
funciones. La entidad dijo que recibieron la comunicación informándolo de la suspensión
del sacerdote polaco de parte del Superior de la Delegación del Caribe de los
Padres Miguelitas, en nombre de la Congregación San Miguel Arcángel. “la cual
hemos aceptado, según las normativas de la Iglesia, extendiéndolas a la
Arquidiócesis de Santiago y a nivel nacional”, dice el documento.
La comunicación del Arzobispado señala que les consta que al momento de la acusación, el padre se encontraba en Polonía, su país natal, debido a sus vacaciones, de donde su congregación le ha pedido que retorne a República Dominicana "para que responda ante esta situación". "Una vez informada la Congregación, le pidió a la Fiscalía que llevara a cabo las investigaciones correspondientes hasta las últimas consecuencias, de acuerdo a las leyes dominicanas, de tal manera que prevalezca la verdad y la justicia, concluye el comunicado del Arzobispado.
De acuerdo a las acusaciones de los padres, los hechos ocurrieron en la comunidad de Juncalito, en el municipio de Jánico, en Santiago, donde el sacerdote violó sexualmente a por los menos 14 infantes. Se informó que el religioso salió hace varios días hacia Polonia y aunque tenía previsto regresar el pasado martes, solo llegaron los niños y un adulto que le acompañaron en el viaje. Según afirmaron en la comunidad, el padre Alberto Gil trabajaba con 180 niños a los que formaba en tareas de rescate. De acuerdo a las versiones, quien descubrió lo que se hacía con los niños fue el grupo Unión de Rescate, cuyos miembros advirtieron que no aceptarán que a la comunidad llegue ningún otro sacerdotes hasta que extraditen a Alberto Gil.
La comunicación del Arzobispado señala que les consta que al momento de la acusación, el padre se encontraba en Polonía, su país natal, debido a sus vacaciones, de donde su congregación le ha pedido que retorne a República Dominicana "para que responda ante esta situación". "Una vez informada la Congregación, le pidió a la Fiscalía que llevara a cabo las investigaciones correspondientes hasta las últimas consecuencias, de acuerdo a las leyes dominicanas, de tal manera que prevalezca la verdad y la justicia, concluye el comunicado del Arzobispado.
De acuerdo a las acusaciones de los padres, los hechos ocurrieron en la comunidad de Juncalito, en el municipio de Jánico, en Santiago, donde el sacerdote violó sexualmente a por los menos 14 infantes. Se informó que el religioso salió hace varios días hacia Polonia y aunque tenía previsto regresar el pasado martes, solo llegaron los niños y un adulto que le acompañaron en el viaje. Según afirmaron en la comunidad, el padre Alberto Gil trabajaba con 180 niños a los que formaba en tareas de rescate. De acuerdo a las versiones, quien descubrió lo que se hacía con los niños fue el grupo Unión de Rescate, cuyos miembros advirtieron que no aceptarán que a la comunidad llegue ningún otro sacerdotes hasta que extraditen a Alberto Gil.