martes, 26 de enero de 20109:24
Mariana Ávila Salcedo tuvo un privilegio del que casi nadie puede presumir. Con su nacimiento, reunió a seis generaciones de mujeres en su familia. Con sólo nueve días de vida, la bebita es el centro de atención de su madre, su abuela, su bisabuela, su tatarabuela y de su trastatarabuela, quienes se disputan el cuidado de la infante.
TATARABUELA...Y OTRA MAS
Mariana Ávila Salcedo tuvo un privilegio del que casi nadie puede presumir. Con su nacimiento, reunió a seis generaciones de mujeres en su familia. Con sólo nueve días de vida, la bebita es el centro de atención de su madre, su abuela, su bisabuela, su tatarabuela y de su trastatarabuela, quienes se disputan el cuidado de la infante.